La Crisis Terminal del Fujimorismo

Con mucha sorpresa, pero sobre todo con enorme desconfianza, peruanas y peruanos escuchamos hace unos días a la Sra. K, a la señora Keyko, hablar del inicio de una nueva etapa, de “reconciliación”, “reencuentro” y “diálogo nacional”.

Resulta increíble que la lideresa del grupo que ha convertido la política en confrontación, golpes bajos, espionaje, denuncias entre hermanos, blindaje a congresistas de su partido con faltas graves, complicidad para la fuga del Juez Hinostroza, leyes para el beneficio personal y familiar, entre otras perlas, quiera hoy realmente una nueva forma de hacer política.

Parece ser más bien, una medida desesperada, pues hoy Fuerza Popular se encuentra en una visible crisis. Por un lado, en el último proceso electoral ha sufrido ya una aplastante derrota, que prácticamente la ha desaparecido de la escena nacional. Por otro lado, se encuentra hoy enfrentando graves acusaciones de la fiscalía, reforzadas por la renuncia de su secretario general, de algunos sus más emblemáticos congresistas, así como por las pruebas presentadas en el proceso, que parecerían demostrar la relación que mantendría con algunas figuras conocidas como operadores del Sr. Montesinos.

Y frente a toda esta vorágine de acontecimientos, que cuestionan además los cimientos sobre los que funciona la sociedad misma y el Estado, peruanas y peruanos nos preguntamos: ¿Hasta cuándo? ¿Puede un país avanzar con estos grupos liderando la política? ¿Qué rol cumplimos las ciudadanas? ¿Los ciudadanos? ¿Hay espacio para generar un cambio de verdad? ¿O ya no hay nada que hacer frente a este Estado secuestrado por las grandes empresas y la corrupción?

Sin duda podemos contestar estas preguntas de diferentes maneras. Algunos sectores piensan que el Referéndum es solo un gesto simbólico, otros piensan que debemos ir a una Asamblea Constituyente, e incluso existen sectores que plantean el cierre del congreso ya, y la necesidad de convocar nuevas elecciones.

Lo que sí nos queda claro es que ha llegado la hora final para el Fujimorismo. Pues si bien en política es frecuente que los “cadáveres políticos” pueden resucitar, parece evidente que crisis que hoy enfrentan, revelan problemas de fondo en dicha agrupación.

Otra cosa que también nos queda claro, es que sin la voz de la calle, esto no tiene solución. Es decir, desde todos los rincones, peruanas y peruanos debemos hacer oír nuestra voz y hacer saber a las grandes mafias y poderes, que no estamos dispuestos a quedarnos con este país que ellos han deformado con sus coimas, sus trampas, y su falsa democracia.

Por eso, desde Llaqtanchispaq afirmamos: en la próxima movilización… ¡tú tienes la palabra!